Una manada de unos 25 cabras pronto llegará al Aeropuerto Internacional O'Hare de Chicago e ir a trabajar malezas comiendo y plantas invasoras en cerca de 120 acres de tierras de propiedad del aeropuerto que es difícil llegar a ella con equipo de jardinería tradicional.
Las cabras y su pastor podría llegar tan pronto como el próximo mes, dijo Gregg Cunningham, portavoz del Departamento de Aviación de Chicago (CDA). Ellos estarán proporcionando "servicios de gestión de la vegetación de pastoreo sostenible", como parte de una de dos años, $ 100.000 contrato otorgado a Centroamérica comisario Holdings, LLC, una empresa con sede en Chicago, que opera restaurantes en varias ciudades y mantiene un pequeño rebaño de cabras cerca de Chicago .
Las cabras se mantendrán lejos de la pista de aterrizaje del aeropuerto por una cerca de seguridad y su mascar estarán restringidos a los sitios que incluyen zonas montañosas cerca de arroyos y ríos y carril lateral derecho de vía. Por la noche las cabras permanecer cerca de un remolque de transporte.
"Podría ser posible en aproximación o despegue para ver las cabras, pero poco probable," dijo la portavoz de O'Hare Karen Pride. "Las cabras estarán a la propiedad del aeropuerto, no en el campo de aviación."
Y mientras que las cabras son nuevos en el aeropuerto O'Hare, los esfuerzos conscientes del medio ambiente a operar una instalación de aviación no lo son.
"El CDA se esfuerza por ser el aeropuerto más sostenible en el país", dijo el orgullo.
O'Hare ya tiene un lanzamiento de suelos, jardín aeropónico en el cultivo de hortalizas y hierbas un terminal que son utilizados por muchos restaurantes del aeropuerto y se venden a los viajeros en un quiosco. También hay colmenas en la propiedad y una serie de otras iniciativas que no servían para la tierra en curso.
Añadiendo a la mezcla cabras ayudará CDA "lograr muchos beneficios económicos, operacionales, ambientales y sociales", dijo el comisionado CDA Rosemarie Andolino en un comunicado.
Las autoridades del aeropuerto que dicen esos beneficios incluyen la disminución de los costes de mantenimiento de jardines - incluyendo combustible, mano de obra, herbicidas y equipos - y una reducción del hábitat disponible para las aves y otros animales salvajes que pueden ser peligrosos para las operaciones del aeropuerto.
O'Hare no es el primer aeropuerto de emplear animales para ayudar con la jardinería. En 2008, Seattle-Tacoma International trajo en cabras a comer las malas hierbas no deseadas, y por último el año 100 el pastoreo de ovejas (además de unas cuantas cabras) se utilizaron como parte de un programa piloto para comer kudzu y otras plantas invasoras en la propiedad perteneciente a Hartsfield-Jackson de Atlanta Aeropuerto Internacional.
"Los animales limpiaron propiedad que era muy difícil acceder con el equipo y hemos sido capaces de redirigir el personal del aeropuerto a otras áreas de operaciones, mientras las ovejas pastaban en la vegetación cercana," dijo Chris Davis, director asistente de mantenimiento en Hartsfield-Jackson. "Es nuestro plan para traer a las ovejas hacia atrás."
En junio, un equipo de cabras hambrientas para regresar a San Francisco Internacional para la novena temporada de control de malas hierbas orgánica en la tierra ambientalmente sensible que es el hogar de dos especies en peligro de extinción, la serpiente de liga de San Francisco y la rana de patas rojas de California.
Las cabras serán gestionados por un pastor de cabras "y habrá un biólogo del medio ambiente en el lugar para supervisar la operación para asegurar la especie en peligro de extinción no se ven afectados", dijo el portavoz del aeropuerto Doug Yakel.